27/3/13

México vs. Estados Unidos

—¿Quieres recordar una eliminatoria fácil? La Volpe. El hexagonal para calificar al mundial de Alemania, además de ser el más pelada, fue cuando mejor he visto jugar a México.

Y curiosamente, no fui yo quien dijo estas palabras. Por eso las enmarco. Las dijo el Quique, ayer como al minuto 60 del partido.

Es chistoso cómo hasta la fecha se sigue cuestionando a Ricardo Antonio, pero la verdad es que el tipo no cometió ni un sólo error durante su proceso al frente del Tri. No es porque él sea mi DT favorito, sino porque aún dándole vueltas a su proceso, no encuentro una razón por la cual demeritar su trabajo.

Primero se le criticó por debutar a jugadores jóvenes en la Selección, como Osorio y Guardado en su momento. Jugadores que a la postre se convirtieron en pilares, con todo y el error increíble del oaxaqueño en Sudáfrica. Después se le criticó por marcar en zona y sufrir goles a balón parado, un problema que ningún estratega a podido corregir en el Tri. Luego vino el tema de los naturalizados. Mucho bla bla bla, para que al final todos terminaran besándole los pies a Sinha, y mejor aún, para que Hugo Sánchez acabara convocando a los dos protagonistas del tema: el mismo Naelson y Guillermo Franco.

Y aún a casi ocho años de sus históricas palabras, la prensa y quien usted quiera, sigue criticándolo por una afirmación que cada vez hace más eco y confirma la inteligencia del argentino. Antes de iniciar el Hexagonal Final durante su estancia al frente del Tri, allá por el '05, La Volpe dijo: "avanzaremos al mundial caminando", y así fue, y nunca en ninguna otra ocasión en la historia, ha sido así.

Pero basta de tanta nostalgia, centrémonos en la realidad. El boleto a Brasil '14 no está perdido, ni siquiera peligra, sin embargo José Manuel De la Torre ya igualó a Sven Goran Eriksson con el segundo peor arranque en el Hexagonal Final, tras haber disputado los primeros tres partidos. Ambos están empatados en tres puntos.

Hay diferencias a considerar. El Chepo ha disputado dos de esos tres partidos en casa, empatando los dos a cero goles, y contra rivales que no han propuesto nada (ya hablaré de este tema en particular). Mientras que Eriksson disputó dos de sus primeros tres cotejos de visita, ganando el juego de local por dos goles. Curiosamente ambos disputaron una visita frente a Honduras, enfrentamiento en el cual he visto los mejores 55 minutos del Tri en lo que va del hexagonal; contrario a Eriksson, en fin. 

Ayer me di cuenta de algo relevante: el rendimiento del Tri no es culpa de José Manuel De la Torre, no directamente. Los culpables son los jugadores. Hay una mezcla de desesperación y apatía en el seleccionado mexicano que no permite consolidar el estilo que el Chepo le había implantado a la Selección en su primer año al mando. La culpa del Chepo está en los jugadores que decide llamar a cada encuentro.

Sigue sin gustarme del todo el estilo de José Manuel De la Torre, pero ahora pienso que más bien ha sido porque los jugadores no lo han entendido por completo, o no han podido optimizarlo por la razón que sea, y eso sí me preocupa. Insisto, dudo mucho que el boleto esté en riesgo, pero qué le espera a México en Brasil jugando a este nivel. Es más, no nos vayamos tan lejos, qué le espera a México en su visita a Columbus, una plaza complicada y pesada para el combinado tricolor. Aunque si algo he notado, es que curiosamente, el Tri juega mejor de visitante.

Insisto en que la solución no es llevar a todos los jóvenes seleccionados que consiguieron la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres '12, a pesar de la gran actuación que ofrecieron anoche Diego Reyes y Javier Aquino. Y ahora puedo decir con tranquilidad, que Omar Bravo ocupó un lugar de oquis. Se supone que había sido convocado para aportar la experiencia que exigen este tipo de cotejos, además de la chispa con la que ha deslumbrado en el Atlas, pero la verdad es que yo sólo vi a un hombre perdido en la cancha, sin ideas ni atrevimiento.

El cuerpo técnico mexicano habrá de repasar los videos de los últimos tres cotejos oficiales, y replantearse el por qué de cada convocado al Tri, si quiere corregir la ruta. Aún hay tiempo, y mucho. Pero al mismo tiempo, el futbol mexicano deberá producir un jugador que cargue con la responsabilidad de echarse al equipo en la espalda y mandarlos hacia adelante cuando se juegue mal, y cuando se juegue bien. Alguien no necesariamente con experiencia, más bien con huevos, como Pavel Pardo, como Ramón Ramírez, como el Matador, como García Aspe, como el Cabrito, como Borgetti, como Cuauhtémoc, como el mismo Torrado, como alguien que ahorita no existe. O bien, el cuerpo técnico nacional deberá aceptar esta realidad, y adaptarse a un estilo de juego sin un líder, ni un '10'. Porque me re cago en la leche que Giovanni Dos Santos no es el que todos creen, es decir, nunca va a subir de su nivel de juego actual, ni será el crack que todos pronosticaban en el '05. Y ojalá que me hiciera quedar en ridículo al decir estas palabras, pero ya van ocho años —y un mundial— y el tipo sigue siendo la eterna promesa (fracaso) del futbol mexicano. Porque el talento lo tiene, pero no la convicción; o a lo mejor no puede superar su ruptura con Belinda y yo estoy siendo demasiado duro con él. ¿Qué me pasa?

En cuanto a lo de anoche, me sentí como en un flashback noventero. Vi a unos Estados Unidos ratoneros, que a pesar de las buenas críticas, para mí no fueron tan ordenados, para muestra la facilidad con la que México se plantaba en el área rival. Fueron las mismas fallas y la falta de ideas del equipo mexicano en la zona de definición, lo que hizo parecer que el equipo norteamericano se supo defender.

Claro que me siento desanimado, porque estoy seguro que la lista para el 4 de junio en Jamaica será prácticamente la misma, con Giovanni Dos Santos, pues. Sin Vela, que a huevo hace falta, sin 'miamor', sin 'narquito' Fabián, sin darle oportunidad a Márquez Lugo, que atraviesa por un momento pocas veces visto en su carrera. Sin embargo eso es todo lo que hay. Pienso en un volante para suplir a Guardado —que ya debería ir a la banca para que vea cómo está el pedo—, y no hay nadie más que Reyna, quien marcó la pauta ayer en el Azteca desde que entró. Pero fuera de él, no hay; Elías Hernández, quizá. Ahorita es cuando uno piensa que Joe Corona sería un buen revulsivo en el equipo tricolor.

Pero ya qué queda; nada. Sólo esperar el 4 de junio.



  • México 0 - 0 Estados Unidos

25/3/13

La lógica se impone

Los expertos empiezan a bromear con la inminente realidad, en caso de que las cosas sigan iguales:


http://www.futbolsapiens.com/2013/03/24/welcome/

22/3/13

México vs. Honduras

¿Y ahora cómo le vamos a poner? Nombre usted el error de su preferencia: Ochoa por Corona; el 'Maza' como capitán; jugar con un punta de inicio (Chicharito), en vez de dos; replegar al equipo al minuto 65; los cambios; las jugadas a balón parado; el penal.

Ochoa no tiene la culpa de nada. No es su pedo que al Chepo se le haya ocurrido ponerlo de titular. Él está asistiendo a una convocatoria, como en ocasiones anteriores, simplemente que ahora le dijeron: "sabes qué, Memo, mañana inicias tú". Eso es todo. Ni el 1-2, ni el penal. De hecho lo vi muy seguro en el marco como para no haber jugado de titular en meses. Sin embargo es una muestra más de los caprichitos que arrastran todos los  directores técnicos. Si Corona es el mejor, pues déjalo.

Es cuestionable el hecho de que Francisco Rodríguez continúe como capitán, dada su muestra de indisciplina al finalizar el encuentro frente a Jamaica. Por supuesto me refiero a sacar el dedo medio. Y después negarlo, argumentando que tiene la mano fracturada. Acéptalo, güey, y se acabó el pedo. Pagas tu multita, y no quedas como un mentiroso. Aunque supongo que tu imagen cuenta, considerando que eres papá.
En fin, no afecta el hecho de que el 'Maza' sea capitán, o no. No pasa nada, en la cancha se dicen miles de insultos, y se hacen miles de señas obscenas más, sólo que son imperceptibles. Salvo las veces que utilizan la cámara Phantom.

Que haya iniciado el Chicharito solo en punta, tampoco afectó en nada. Así se controló el partido durante algunos minutos, y se consiguió una ventaja que a lo largo de la historia del futbol, siempre se ha considerado cuestionable. Hoy vimos (otra vez) por qué.

Replegar al equipo al minuto 65. Ding, ding, ding, y más onomatopeyas de concursos de televisión. Error número uno. Es una característica de José Manuel De la Torre cerrar los partidos cuando ya están controlados y el resultado es favorable. Pero, 1) ¡Es el minuto 65! ¡Espérate un poquito! Aunque sea 10 minutos más. Y 2) ¿Qué clase de ajuste para cerrar es ese? Bravo y Jiménez; y al final Herrera. ¿Para qué dos delanteros ahora sí? Y después, ¿para qué un contención si sólo te vas a quedar con un volante para surtir de balones a tus dos delanteros? ¿Así de obvio quieres ser, demostrándole al rival que vas a jugar a balonazos durante 15 minutos, con el marcador empatado? Y Reyna sentadito.

Las jugadas a balón parado son el eterno problema a corregir por el Tri. No estoy seguro si voy a alcanzar a ver el día en que la Selección deje de padecer ese mal, en cada tiro de esquina, tiro libre, etc. Y el penal, pues claro que fue un regalo.

Pero hay otros puntos a considerar. Les aseguro que esta no es una campaña en contra de Giovanni Dos Santos, pero en serio, ¿qué ven en él? El tipo no hizo nada relevante en todo el partido, más que al minuto 3, cuando se cayó solo; ah, y el tiro libre que voló.

Guardado no es el mismo de antes, y ya tiene rato así. Salvo el centro que puso para el gol, lo demás de regular a malo.

¿Para qué se llaman a tantos contenciones al Tri? Salcido, Zavala, Herrera, Torrado, Molina, 'Gullit'. ¿Para qué hay otros tres centrales de banca, si el mismo Salcido acaba haciendo esa función, agregándose como un tercero en un ajuste defensivo?

De por sí no me gustaba el estilo del Chepo, ahora menos. Insisto, no le cuestiono lo que ha hecho con la Selección, estamos de acuerdo en que él sabe mucho más que yo. Pero he visto muy pocas veces un estilo atractivo en la cancha, y creo que en estos últimos dos partidos se está notando.

Acepto que en el fondo había una parte de mí que quería ver un resultado desfavorable para el equipo mexicano. Pero como siempre, quería verlos ganar. Y cuando vi un 2-0 a favor, pensé en el posible repunte de la Selección. Pero creo que me equivoqué. Que igual lo sigo esperando, claro que sí. Mañana se me olvida, al cabo que el Tri ya me ha dicho antes que ahora sí va a jugar bien.

Ya caele, Vasco. El destino del Tri parece ser un loop infinito.


  • Hunduras 2 - 2 México (Honduras: Costly, Bengston. México: Chicharito [2]).

21/3/13

Balonazos

1.- Estar con la porra visitante es otro pedo. Sentir a tu gente, Raya. Que le canten a la porra local que no tiene vergüenza, por festejar el empate como un triunfo descomunal. Pero que mi amor supiera que yo estaba en la gradería norte, y metiera el gol del empate, justo la semana que el Chepo decidió no convocarlo al Tri, ese es el sentimiento de la semana.

2.- Esperar con ansia para comprar los boletos del primer partido de la Copa Oro, cerca de casa, y que abre México, para que te digan: "ese día son las elecciones y nos va a tocar venir a la oficina". Eso es para que te lleve el carajo.

3.- Saber que el Chupete firma su renovación de contrato hasta el 2016, justo la misma semana que La Raya mostró su mejor nivel de juego en lo que va del torneo. Ya sin preocupaciones, y con Suazo tranquilo, eso es para decir que se avecina el repunte Rayado.

4.- Que Jonathan Orozco se lesione y se pierda cuatro de los últimos seis partidos definitivos para alcanzar el boleto a la Liguilla, es para preocuparse. Pero no, ahí está Juan de Dios Ibarra. Además así le dijeron a la Pina, y acaba de jugar el sábado pasado. Y yo lo vi en vivo.

19/3/13

Resumen Jornada 11


  • Jaguares 1 - 1 Monarcas (Jaguares: Rey. Monarcas: Rojas).
  • Gallos 1 - 0 Diablos (Gallos: Novaretti [A]).
  • Águilas 1 - 1 Tuneros (Águilas: Negro. Tuneros: Cuevas).
  • Tuzos 2 - 1 Camoteros (Tuzos: Carreño, Reyna. Camoteros: De Buen).
  • Tigres 1 - 1 Chivas (Tigres: Chilindrina. Chivas: Sabah).
  • Zorros 1 - 2 Santos (Zorros: Bravo. Santos: Salinas, Quintero).
  • Perros 2 - 2 Rayados (Perros: Martínez, Riascos. Rayados: Aldo, Riascos [A]).
  • Pumas 0 - 0 Esmeraldas
  • Potros 0 - 3 Cementeros (Cementeros: Pavone [2], Jiménez [A]).

14/3/13

La lista vs. Honduras y Estados Unidos

A huevo que me molesta que Aldo De Nigris no forme parte de esta convocatoria. Pero lo entiendo, es un reflejo del mal paso por el que atraviesa La Raya. Sin embargo, ese no es el problema. Tanto que se habla sobre no abaratar la camiseta de la Selección Nacional, y hoy vemos a Omar Bravo de regreso con el Tri, y para dos partidos oficiales.

Entiendo que la línea de José Manuel De la Torre a lo largo de su dirección técnica al frente de La Verde, siempre ha sido llamar a quien pase por buen momento, pero creo que perdió la memoria. Omar Bravo no juega con la Selección Nacional desde la era Eriksson, es decir, hace casi cuatro años. Repasemos su trayectoria durante esos años de ausencia. 

Poco antes de no volver a vestir la camiseta nacional —hasta esta ocasión, claro—, el oriundo de Los Mochis, Sinaloa, jugó para el Deportivo La Coruña, en España, en un paso por demás mediocre en el futbol europeo. Obviamente regresó a México, para pintarse de Tigre. Su paso por los Tigres también fue de regular a malo. Con esperanzas de recuperar el nivel de aquel joven que debutó en el Tri al frente de La Volpe, Jorge Vergara lo recontrató para que militara en las Chivas. Su regreso al Rebaño fue otro mal paso. Tanto así, que se vio en la necesidad de emigrar a la Mayor League Soccer (MLS), de Estados Unidos. Ahí jugó para el Sporting Kansas City. Nada sobresaliente. Cruz Azul lo repatrió, pero se arrepintieron pronto. Fue entonces cuando la directiva de su club actual, el Atlas, tomó la iniciativa de solicitar sus servicios. Y ahí es donde en los últimos meses, ha dado muestra de que empieza a retomar su nivel. He aquí la palabra clave: 'empieza'.

A penas se han jugado 10 fechas de la Liga MX, y eso ya representa argumentos suficientes para que el Chepo considere que Bravo merece volver al Tri. No estoy en contra de su llamado, pero creo que se precipitaron.

Quizá la falta de goles en la Selección Nacional tenga desesperados a los dirigentes de la FMF, y por eso decidieron llamar a quien se sitúa como uno de los segundos mejores goleadores de la Liga MX, empatado con Aldo De Nigris, y Raúl Jiménez (¿me explico?)

O quizá la memoria de José Manuel De la Torre es tan buena, que recuerda perfectamente que la última vez que Omar Bravo jugó bien en el Tri, fue cuando él lo dirigió en las Chivas. Tanto, que 'Omarcito' hasta tuvo lo oportunidad de ir a un mundial, anotarle dos goles a Irán, y volar un penal frente a Portugal, claro.

De lo de Talavera, ya mejor ni hablamos.

Esta es la lista:

Porteros:
J. Corona | Cementeros
A. Talavera | Diablos
G. Ochoa | FC Ajaccio (Francia)

Defensas:
C. Salcido | Tigres
H. Ayala | Tigres
J. Torres Nilo | Tigres
F.J. Rodríguez | Águilas
D. Reyes | Águilas
S. Meza | Rayados
J. Magallón | Esmeraldas
H. Moreno | Espanyol de Barcelona (España)

Medios:
Á. Reyna | Tuzos
H. Herrera | Tuzos
G. Torrado | Cementeros
J. Zavala | Rayados
J. Molina | Águilas
A. Guardado | Valencia FC (España)
J. Aquino | Villareal FC (España)

Delanteros:
O. Bravo | Zorros
O. Peralta | Santos
R. Jiménez | Águilas
G. Dos Santos | Mallorca (España)
J. Hernández | Manchester United (Inglaterra)

11/3/13

Carta al Perro #8

Justamente hoy en la tarde estaba pensando en ti: "el sábado nos vamos a encontrar, tengo que escribirle al Perro".

¿Te acuerdas lo que pasó la última vez? Unos días antes del partido de ida por los cuartos de final del Apertura 2012, una serie de hechos en los cuales había perros involucrados, empezaron a suceder a mi alrededor. Yo los interpreté como una especie de señales. Ya sabes cómo soy de cursi.

Hace unas horas salí a correr, y como si el destino o lo que sea, no quisiera que me olvidara de escribirte, me topé con un perro vagando en media calle, uno que nunca había visto antes en la cuadra. Yo no llevaba ni media vuelta corriendo, y el perro se encontraba deambulando lentamente entre uno de los carros, como si estuviera buscando algo, o esperando a alguien; aunque suene exagerado. 

Al principio pensé que aguardaba a su dueño, quien posiblemente se había quedado unos pasos atrás. Después pensé que estaba perdido. En cuanto pasé a su lado, el can inició una carrera a mi costado izquierdo, volteándome a ver. Quizá la emoción de jugar le ganó al principio, porque me superó en velocidad rápidamente, pero al notar que mi paso era constante, bajó la intensidad hasta permanecer junto a mí. Derecha o izquierda, a veces un poco adelante, y otras retrasado por olfatear a los demás perros, pero siempre cerca.

Y así nos fuimos la primera vuelta. Imagina mi sonrisa. Para la segunda, desapareció entre los carros. Pensé que ya no lo volvería a ver. Pero en la tercera vuelta, regresó. Fue cuando dejé de correr, entonces él lo hizo también. Caminó a mis costados, intentando lamer mis manos, y contra todas mis costumbres, me contuve y evité acariciarlo. "Aquí no puedo tener perros", dije.

Cuando terminé las tres vueltas, le pregunté al guardia por los dueños de este amigo canino: "Pos ya es tuyo, carnal", respondió. Y ganas no me faltaron.

El Perro se detuvo justo cuando entré a la casa, y se quedó esperando a que saliera de nuevo. Pero no lo hice, al contrario, lo corrí, para que no hubiera ningún vínculo, más que ese paseo. Él lloró un poco, aulló, y hasta ladró para que saliera. Pero nada. A los pocos minutos se cansó y se marchó.

Fue algo así como el perro que enjugó el llanto de la mujer en el ensayo sobre la ceguera de José Saramago. Hermoso. Un poco más que ver a un perro jugando con el portero en una cancha de futbol profesional.

De por sí, amo correr. ¿Así cómo quieren que deje de hacerlo?

No sé cómo interpretar esto, Perro. No sé qué quieres decirme. Pero creo que estoy a punto de averiguarlo.

Resumen Jornada 10

Sólo estoy contando los días. Cómo vengas, Raya. Yo te voy a ver. Ya tengo los boletos.


  • Monarcas 1 - 1 Águilas (Monarcas: Mancilla. Águilas: Chucho).
  • Cementeros 1 - 1 Jaguares (Cementeros: Bertolo. Jaguares: Rey).
  • Santos 2 - 1 Potros (Santos: Hérculez, Cepillo. Potros: Paredes).
  • Perros 0 - 1 Gallos (Gallos: Cosme).
  • Rayados 2 - 1 Esmeraldas (Rayados: Zavala [2]. Esmeraldas: Britos).
  • Tuneros 1 - 2 Tigres (Tuneros: Corona. Tigres: Lobos, García).
  • Diablos 0 - 1 Zorros (Zorros: Millar).
  • Camoteros 0 - 1 Pumas (Pumas: Bravo).
  • Chivas 1 - 0 Tuzos (Chivas: Márquez Lugo).

9/3/13

Carta a La Raya

Alguna vez, el Juan Carlos y yo hablamos de esto al respecto: él con la Furia y yo con La Raya. Nuestra relación era casi la misma.

Yo te amo, Raya, lo sabes. Pero ya no te conozco. Siento que cambiaste, eres completamente otra, y eso que aún conservas los mismos 'gestos' que cuando éramos felices. Pero la felicidad se ha ido. Esta relación se sostiene ya ni siquiera del pasado, sino de un lazo enfermizo, que más que mantenernos atados, me mantiene atado a ti. No puedo dejarte, ni quiero. Y no es peor, simplemente así confirmo esta patología. Quiero quedarme a tu 'lado'.

Pero ¿cuál lado? Tú ni siquiera estás aquí. Nos separan más  de 2 mil 300 kilómetros de distancia. Sólo te veo por televisión o por la pantalla de mi computadora. Seguramente estoy entre los novios más estúpidos que has tenido. Casi nunca vienes a verme, y lo entiendo, las condiciones no se han dado, pero en 13 años de relación, sólo nos hemos visto dos veces.

Y el próximo fin de semana voy a verte, al fin. Pero no estoy seguro de qué es lo que voy a ver. Nuestras últimas interacciones vía internet han sido de lo menos placenteras; por el contrario, han sido inquietantes.

Tampoco es queja. Sólo quiero volver a ser feliz contigo. Pero, ¿para qué me hago pendejo? Si no cambias, de todos modos ahí voy a estar apoyándote.

No me malinterpretes, el próximo sábado no voy a ir a verte por compromiso. Voy a ir porque realmente me estoy quemando por sentirte. Aunque tenga que morderme los labios.

8/3/13

1



A un año del choque, puedo decirte: estoy bien, amigo. Esto tenía que pasar. 

Te tengo bien presente en mi cabeza, casi a diario, no por masoquista, sino porque el lugar del choque esta en mi ruta a casa; además, ya sabes cómo es esta memoria.

Pero no te preocupes, que esas dos puntadas me siguen haciendo cosquillas, para que no se me olvide por qué las tengo. Y no se me olvida.

5/3/13

El ciclo normal de la vida

Naces en México, eres varón. Creces, pero nada más poquito, porque en cuanto empiezas a tener conciencia de tus actos, el futbol ya entró en tu vida, aunque sea de manera indirecta. Si tu papá vive contigo, escuchas de futbol por él, y si no de todos modos lo ves en la escuela durante el recreo; es más, dejas de verlo porque tus compañeros ya te dicen que "le entres a la reta".

Continúa tu desarrollo como ser humano. Te empiezas a interesar por las chicas, pero antes de eso, te empiezas a interesar por un equipo de futbol. Entonces inicia tu primera relación amorosa, y tú ni te enteras. Tu primer equipo es el más popular de la liga mexicana —o de cualquier liga—, o en el que juega tu ídolo. Regularmente el amor por ese equipo se va, y conforme llegas a la adolescencia, cambias de equipo, hacia uno con el que en teoría te sientes identificado. Tal y como el primer amor, tu primer equipo se va, y es sólo eso: una probadita de lo que esto realmente es.

Con nuevo equipo, el amor empieza a florecer; este sí es el bueno, y ya no importa nada. Pero, ¿cómo fue que te enamoraste de este equipo? Piénsalo. Si tienes convicción, tu fijación por este club, es un poco distinta a las demás. No es por moda, tampoco porque sea el equipo que va rompiendo la liga, es más, tu club a penas tiene un convocado a la Selección Nacional. Tu equipo oscila entre los lugares de media tabla, con algunas posibilidades de clasificar a las finales, pero no como líder del certamen.

Eso es amor, y no conveniencia. Quizá por una cuestión de dramatismo (o problemas internos), escogiste un equipo que no te garantizará títulos, pero emociones fuertes, sin duda. Obtiene todo tipo de resultados; sus partidos de media liga son empates abultados, derrotas decorosas, o victorias de último minuto. Definitivamente te gusta sufrir. Porque si fueras inteligente, serías culé, al cabo que el Barcelona le gana al que se le ponga enfrente —hasta la semana pasada—. Pero qué flojera, que tu club siempre gane no es emocionante. (Quizá el equipo de preferencia sea un reflejo del tipo de relación amorosa que el aficionado al futbol sostiene. Aclaro: quizá).

Por otro lado, tu interés por las chicas ya es todo un hecho. Tienes, una, dos, tres, diez novias. Las cosas no han funcionado, y has tenido que romper con una y otra, porque no hay necesidad de tener problemas amorosos; vamos, no quieres una relación patológica. Pero, ¿qué tal va tu relación con el equipo de futbol de tus amores? ¡Ha! "Está peleando el descenso, pero se van salvar. Seguro que el próximo fin de semana ganan". Pasan dos años, tu equipo mantiene la categoría, toma un buen nivel, y es campeón. La relación se vuelve inquebrantable, e indudablemente patológica. Nada más fíjate por cuantos vaivenes emocionales has pasado desde que te identificaste con esos colores futboleros.

Pero después del campeonato, ese club se va de pique, otra vez. Si eres un villamelón —algo sumamente común en este hermoso país—, y tu equipo no levanta el vuelo después de dos temporadas, lo cambias por otro. Si eres uno de los 'barras', les recriminas con violencia, en los partidos haces desastres en estadios y camiones para que sepan que te están fallando; ¿cómo te van a responder así si tú siempre les has sido fiel? Claro que siempre les has sido fiel, por eso cuando juegan contra San José de Oruro de Bolivia, despliegas una manta enorme en la gradería sur, con la leyenda 'Siempre fiel', porque los "barras sí son aficionados de verdad, y nunca faltan a los partidos; nomás al encuentro frente a Estudiantes Tecos en la fecha 9 del Apertura 2011, pero eso porque iban mal en la liga" y tenían que saber que no estabas conforme.

Ahora, si eres aficionado de verdad, de convicción, el escenario es este: y ahí estás, cada fin de semana, o cuando sea que tu equipo juegue. Te pinteas clases, pides permisos en el trabajo, cambias citas, etcétera, todo por ver a tu equipo. Aunque pierda, lo sigues. Haces corajes, pero la siguiente semana ahí estás otra vez. No lo dejas, no puedes, no pierdes la esperanza que al siguiente partido retome el camino del triunfo. Aguantas todas las burlas, pero tú eres fiel, incluso le eres más fiel a tu equipo que a tu novia.

Esperas el sábado o el domingo (según sea si juega de local o visitante) para volver a ver ganar a tu equipo, y desahogar todas las penas acumuladas en la semana por el trabajo y las relaciones sociales. El árbitro silba el inicio y tú destapas la primera cerveza. Gol en contra: "no le hace, hombre, ahorita empatamos". Pero los jugadores del club de tus amores parecen estar pensando en otra cosa, y se caen solos, equivocan pases de trámite, fallan oportunidades claras de gol, no se hablan, y para acabarla de amolar, les meten otro gol. Entonces tus gritos ya no son de placer, son de coraje. Y tus penas, más allá de ser desahogadas con el grito de la victoria, o un gol si quiera, se acumulan gracias a que tu equipo no la trae derecha. El árbitro silba el final, y tú terminas borracho y enojado.

¿Qué necesidad tienes de andar pateando botes en las calles, solo y desilusionado, todo por causa del futbol? Pues ninguna, pero ya estás bien enamorado, y ni cómo dejar a tu equipo.

Creces más, finalmente decides casarte. Te reproduces. Algunos de tus hijos —porque si son fresas, olvídate de que les vaya a gustar ese deporte de nacos, albañiles, del pueblo, sin cultura, y todos los adjetivos denigrantes posibles para el futbol, gracias— viven casi el mismo ciclo que tú cuando eras niño. Creces aún más, te vuelves abuelo. Algunos de tus nietos viven un ciclo muy similar al de tus hijos a los que sí les gusta el futbol, y al tuyo. Mueres.

Resumen Jornada 9

La Raya se hunde en la tabla general de la Liga MX, y yo junto con ella. Pero todavía hay chance de sacar el agua acumulada, el problema es encontrar la manera de hacerlo.


  • Jaguares 1 - 3 Santos (Jaguares: Rey. Santos: Hérculez [2], Cepillo).
  • Gallos 1 - 0 Rayados (Gallos: Cosme).
  • Águilas 3 - 0 Cementeros (Águilas: Chucho [3]).
  • Tuzos 2 - 1 Tuneros (Tuzos: Suárez, Reyna. Tuneros: Pérez).
  • Tigres 1 - 1 Monarcas (Tigres: Lobos. Monarcas: Ochoa).
  • Esmeraldas 0 - 1 Camoteros (Camoteros: De Buen).
  • Zorros 1 - 0 Perros (Zorros: Bravo).
  • Pumas 1 - 1 Chivas (Pumas: Bravo. Chivas: Sabah).
  • Potros 0 - 1 Diablos (Diablos: Tejada).

1/3/13

El ídolo nacional

So. Nos mandan a cubrir el evento conmemorativo al 488 Aniversario Luctuoso de Cuauhtémoc. Ya en el acto cívico, la maestra de ceremonias invita al estrado a una reconocida historiadora de la ciudad, para que haga una breve semblanza del último emperador azteca —aunque en esta última afirmación, muchos fans de las Chivas podrían estar en desacuerdo, alegando que tal título, le pertenece a Claudio Suárez—.

Entre los pocos segundos que la historiadora tarda en dirigirse de su lugar al estrado, uno de los hombres detrás de las bocinas, dice —por favor, imagínelo con ese característico tono de voz de Andrés Bustamante, en el personaje de 'Ponchito'—:

—Sí, este, Cuactémoc (tal cual) inició su trayectoria en el América. Al comienzo de su carrera fue un gran extremo derecho, con Leo Beenhakker...

Y continúa hablando un poco más, pero la voz de la historiadora en las bocinas no me deja escuchar; y él, al mismo tiempo se detiene por el mismo sonido de la voz.