Del partido hablamos poco. Sobra decir que estuvo apretadísimo. Apto para quienes nos gusta el duelo de estrategias, y no nos aburre de vez en cuando un encuentro aburrido, valga la redundancia.
Cada vez me sorprenden más los ajustes del Vuce, quien se nota está consciente de que los partidos restantes habrá que parchar el cuadro. Por eso mandó a Mier como lateral derecho, y para mi gusto hizo un buen partido. Se proyectó cuando tuvo que hacerlo —y falló en la más clara de sus aproximaciones al momento de recortar—, y aguantó todos los embates por su banda y el centro. Muy buen 'ida y vuelta'. Puede ser una opción en situaciones como esta.
El problema fue el arbitraje, que acabó con los volantes rayados de experiencia. Es irónico que quien recibe una falta digna de tarjeta roja, acabe siendo expulsado por una entrada mucho menos fuerte.
El Guty Estrada se barrió sobre el Chelito con la intención de cortar un contragolpe que pintaba para gol. Estrada fue directo al hombre, arrollándolo y sin tocar la pelota. Roberto García Orozco decidió no amonestarlo porque eso implicaba una expulsión por segunda amarilla, y ahí perdió el piso.
En el segundo tiempo, el Chelito fue a cortar un avance —nótese, 'avance' no es lo mismo que 'contragolpe'— de Hérculez Gómez, y en fracciones de segundo, al saberse superado por la velocidad de la jugada, recogió ambas piernas con las que había ido a disputar la pelota. Hérculez saltó como si le hubieran roto la pierna, cuando únicamente le rozaron la punta del pie, y consiguió lo que estaba buscando desde que entró al campo, una tarjeta para el contrario. Para la mala suerte del Chelito, el árbitro estaba en una pésima posición, y al parecer sus tres asistentes también, porque ninguno fue para decirle con claridad qué había pasado. Entonces García Orozco, creyendo la actuación de Hérculez, corrió hacia el Chelito con la tarjeta roja en la mano, y el argentino, que había sido el mejor hombre en la cancha, se fue de la final.
Ahora La Raya se ha quedado sin volantes ofensivos de experiencia. César Delgado está suspendido; Osorio y Neri son duda, todavía; y la Pina no puede jugar el torneo porque inició la fase de grupos con otro club participante (Chivas). Eso deja como única posibilidad viable a Ayoví, quien inicialmente jugaba como volante por izquierda, para que ocupe una de las bandas en el partido de vuelta. Eso si el sábado no termina lesionándose también.
Se habla de que Oribe Peralta posiblemente se pierda el cotejo en el Tec, por la lesión sufrida en el supuesto penal. Pero la verdad no creo. Tampoco digo que sea justo que no esté, aunque quizá eso emparejaría un poco las cosas.
¿Descanso por el 0-0? Para nada, yo no voy a descansar pura madre. Otra vez como en el 2010. Aquí la ventaja la tiene Santos. Ni hablar.
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